
Una noche que sucede a otro día,
de esos días donde los sueños
caminan a la deriva,
de tiempos que transcurren lentos
y aprietan los tobillos recordando
la inmovilidad de los deseos.
Otro día que nace de una noche
sin sueños ni sueño,
cuando unos ojos secos
buscan insistentes una luz,
tal vez una estrella
que vuelva a iluminar
un camino de esperanza
siempre nueva.
(A.A.M.) (c) 2011