Y cuando todo está del revés,
Y cuando los puzzles se deshacen
y se pierden sus piezas,
en mares de silencios,
en desiertos de palabras;
Es cuando me bebo
sorbo a sorbo mis lágrimas
y me refugio como entonces,
como siempre,
en el abrazo eterno de mis libros,
de mis poemas,
de la palabra verdadera de una historia.
Pongo una rosa roja en mi pelo
abro las alas y....... vuelo.
(A.A.M.) © 2013
Precioso homenaje al día del libro y la rosa.
ResponderEliminarDigno de su autora.
Un abrazo.
Un abrazo querido Juan, una forma de homenaje por ese amor y refugio de los que amamos los libros y la poesía.
EliminarMuchas gracias
Cuánto le debemos a las letras, a los libros, a la poesía.
ResponderEliminarVuela alto, Ana, tú puedes.
Besos.
Y los días que no puedo, lo intento te lo aseguro Tomás. Un abrazo fuerte, yo le debo muchos tiempos, muchos silencios y mucha vida.
EliminarGracias un beso
Tantas veces un libro nos puede evadir de momentos tristes de la vida, Ana. Yo todavía soy de las que me gusta acariciar el tacto del papel. Me da mucha pena que en las nuevas generaciones los libros estén quedando relegados a otras formas de lectura (no es que vaya en contra de ellas, pero...), es tan distinto, no se, más frío. Está ocurriendo como las "cartas", que ya ha pasado a la historia...
ResponderEliminarUn abrazo
Fina
A mi me ocurre lo mismo Fina, tengo libros que huelen a mil cosas, a mis historias, a mil vidas, en sus relecturas encuentro siempre una caricia y ya no te digo los que eran de mis padres a los que ya no tengo conmigo, reivindico el libro de papel por supuesto y también me gusta escribir cartas y notitas que guardo.
EliminarOtro abrazo para ti Fina muchas gracias
Escudo y refugio... las letras. ¡Cuanto por agradecerles!
ResponderEliminarHago mío tu homenaje. ¡Besos!
Eternamente :-) un beso Magda y muchas gracias
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