y seguiré esperando. como los amarillos del otoño, todavía palabra de amor ante el silencio, cuando la piel se apague, cuando el amor se abrace con la muerte y se pongan más serias nuestras fotografías, sobre el acantilado del recuerdo, después que mi memoria se convierta en arena, por detrás de la última mentira, yo seguiré esperando (L.Gª.Montero)
viernes, 1 de marzo de 2013
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Mis manos cuidan siempre cuidan, el hueco que espera eternamente tus manos.
Ana discúlpame si te ha molestado mi comentario, continuaré atento a tus poemas , y solo decirte que en mí lo bello siempre perdurará en mi recuerdo. Hasta siempre. Paco.
Pues no sabes cuanto me alegro Fina, yo admiro tu poesía, te agradezco mucho tus palabras y tu visita, a veces en unos breves versos se concentra todo un sentimiento.
Siempre hay un hueco caliente en las manos que aman para compensar la frialdad de la ausencia.
ResponderEliminarUn abrazo.
Y siempre lo habrá, por que la ausencia también tiene su sitio y también la esperanza.
EliminarUn abrazo también para ti Juan
Ana discúlpame si te ha molestado mi comentario, continuaré atento a tus poemas , y solo decirte que en mí lo bello siempre perdurará en mi recuerdo. Hasta siempre. Paco.
ResponderEliminarPrecioso poema. Me gusta la imagen que queda en e hueco que espera. Un beso AnusKa.
ResponderEliminarGracias Juanjo, imagen de esperanza puede ser en ese hueco de unas manos.
EliminarMe alegra mucho que te guste, muchas gracias y un abrazo fuerte
Que hermoso poema, amiga, corto, pero intenso. Ese hueco lleva mucho, mucho amor. Me han llegado al alma estos versos, querida Ana. Mi felicitación
ResponderEliminarFina
Pues no sabes cuanto me alegro Fina, yo admiro tu poesía, te agradezco mucho tus palabras y tu visita, a veces en unos breves versos se concentra todo un sentimiento.
ResponderEliminarUn beso grande